Desodorante: protección contra el mal olor
La función principal del desodorante es neutralizar el olor causado por las bacterias que se desarrollan al momento de sudar. Al aplicarlo, se forma una capa que te protege contra el mal olor sin interferir en el proceso natural de sudoración del cuerpo.
Un ejemplo es el desodorante Neutro Balance Zero% que te protege contra el mal olor hasta por 48 horas. No tiene aluminio y es unisex, ideal si prefieres una protección más ligera.
Antitranspirante: protección contra el sudor y el mal olor
A diferencia del desodorante, el antitranspirante se encarga de controlar la sudoración en las axilas al reducir el nivel de humedad en la piel, por lo que es una gran opción si tienes muchas actividades durante el día, si practicas ejercicio o si prefieres una protección de larga duración.
Al regular el sudor, los antitranspirantes ayudan a mantener tus axilas secas, evitando la humedad. Si buscas este tipo de protección, prueba el antitranspirante Neutro Balance Dermoprotector, su fórmula te protege contra el sudor y el mal olor hasta por 48 horas y deja tu piel visiblemente hidratada*.
¿Qué ocurre con el mal olor?
Pues bien, nuestro cuerpo posee entre 2 y 4 millones de glándulas sudoríparas distribuidas a lo largo de la piel, divididas en dos tipos principales: las glándulas ecrinas y las glándulas apocrinas.
Las glándulas ecrinas están presentes en casi todo el cuerpo y, al activarse, liberan agua y sales sin producir ningún tipo de olor. En cambio, las glándulas apocrinas, ubicadas principalmente en axilas, ingles, cuero cabelludo y algunas zonas del rostro, producen un sudor más espeso y rico en proteínas y lípidos.
Esta composición particular atrae a las bacterias presentes en nuestra piel, que al descomponer estos componentes generan el mal olor asociado con la transpiración.
Ahora que sabemos que el mal olor es el resultado de esta interacción natural en nuestro cuerpo, es útil aprender cómo prevenirlo. Aquí te damos tres consejos para evitar el olor corporal y sentirte fresco todo el día.
1. Báñate a diario. Mantener una rutina de baño es clave para reducir el crecimiento de bacterias en la piel. Usa un jabón como Neutro Balance Antibacterial, que elimina el 99.99% de las bacterias** y mantiene tu piel limpia y en balance.
2. Elige un outfit adecuado para tu día. Las telas de origen natural, como el algodón, la lana y la seda te ayudarán a que tu piel respire y tenga menos necesidad de refrescarse. Para hacer ejercicio, opta por telas diseñadas para absorber la humedad de la piel. Observa las etiquetas y elige la que mejor se adapte a tus necesidades.
3. Haz pequeños cambios en tu dieta. Reducir el consumo de cafeína y alimentos picantes o de olor fuerte puede ayudar a controlar la sudoración. Estos alimentos pueden estimular el cuerpo, aumentando la transpiración, lo que puede afectar tu frescura a lo largo del día.
Para elegir la mejor opción que cuide y proteja tu piel del mal olor, es importante considerar el tipo de producto que mejor se ajuste a tus necesidades y estilo de vida. Con nuestra línea de desodorantes y antitranspirantes Neutro Balance, tendrás la protección y confianza que necesitas para comenzar tu día.
Recuerda que una piel en balance te ayuda a que puedas expresarte y conectar con confianza. Conoce los productos Neutro Balance y descubre sus beneficios para cuidar tu piel.
*Basado en estudio con consumidores.
**Bacterias probadas: E.coli, S.aureus.